Cámara termográfica para el mantenimiento PCE-TC 30N - PCE Instruments

La cámara termográfica es una herramienta profesional indispensable para trabajos de mantenimiento, inspección técnica y detección preventiva de fallos en entornos industriales. Diseñada específicamente para tareas de supervisión térmica, esta cámara termográfica es ideal para electricistas, técnicos de mantenimiento, cerrajeros, y personal especializado en HVAC (calefacción, ventilación y climatización). Su construcción robusta permite operar incluso en condiciones adversas, manteniendo un rendimiento constante y fiable. El corazón de la cámara es un microbolómetro no refrigerado con una resolución térmica de 160 x 120 píxeles, lo que proporciona imágenes térmicas detalladas y nítidas. Esta resolución permite identificar puntos críticos de calor, fugas térmicas o anomalías en componentes eléctricos y mecánicos. Con un rango de temperatura de hasta 450 ºC y una precisión de ±2 ºC o ±2 %, la cámara es ideal para inspeccionar cuadros eléctricos, motores, rodamientos, válvulas, intercambiadores de calor, separadores de vapor y mucho más. Uno de los aspectos clave es su sensibilidad térmica ≤ 0,1 ºC, lo que permite detectar mínimas diferencias de temperatura que podrían anticipar fallos mecánicos, sobrecalentamientos o pérdidas energéticas. Además, trabaja a una frecuencia de imagen de 9 Hz, suficiente para tareas de mantenimiento y vigilancia periódica. La cámara termográfica dispone de enfoque fijo, facilitando su manejo rápido sin necesidad de ajustes complejos. Su diseño ergonómico y peso ligero de 389 gramos la hacen perfecta para trabajos prolongados y tareas en campo. Puede utilizarse cómodamente con una sola mano, lo cual es especialmente útil en entornos industriales donde la movilidad es esencial. Dispone de varias paletas de color para adaptar la visualización térmica a distintas necesidades, mejorando así la interpretación de las imágenes térmicas. La pantalla de alta calidad permite visualizar el punto más caliente y más frío dentro del campo de visión de forma automática, agilizando el diagnóstico térmico. La cámara puede almacenar más de 20.000 imágenes térmicas en formato JPG gracias a su capacidad de memoria integrada. Esta funcionalidad facilita la documentación de las inspecciones, el seguimiento de problemas recurrentes y la elaboración de informes técnicos. La transferencia de imágenes al ordenador se realiza mediante conexión por cable, permitiendo guardar, compartir o analizar los datos con software externo. Otra ventaja práctica es la iluminación LED integrada, que mejora la visibilidad en entornos oscuros o con iluminación limitada. Esto permite localizar con precisión la zona de inspección y facilita el trabajo en condiciones desfavorables. Esta cámara termográfica portátil es una solución eficiente y económica frente a modelos más costosos del mercado, sin comprometer la calidad ni la precisión. Gracias a sus potentes funciones, fiabilidad y facilidad de uso, representa una excelente inversión para cualquier departamento de mantenimiento, empresa de servicios, planta de producción o taller eléctrico. En resumen, esta cámara termográfica para mantenimiento combina precisión, portabilidad, autonomía y funcionalidad. Con ella, es posible identificar y corregir fallos antes de que se conviertan en averías graves, garantizando la seguridad operativa y reduciendo los costos asociados al tiempo de inactividad de equipos e instalaciones.